Este fin de semana hemos tenido cumpleaños en casa: el padre de mis criaturas ha cumplido años. 🙂 Y aunque él es el rarito de la familia, pues es el único que no es celíaco, su tarta no podía ser más que sin gluten, por razones obvias:

1ª) la iba a hacer yo

2ª) no íbamos a quedarnos la mayoría mirando

3ª) considero que no tiene edad de darse un atracón de tarta él solito, que 44 ya son un buen puñado de años 😛

Esta vez no me apetecía hacer bizcocho, ni mucho menos encender el horno, así que recordé la tarta típica de galletas que mi madre siempre nos hacía por los cumpleaños, y que aún siendo mi favorita nunca la había hecho sin gluten hasta ahora.

Todos sabemos que receta de esta típica tarta de galletas hay tantas como madres y abuelas, y que para cada uno de nosotros la receta de su familia es la mejor, pero siento deciros que estáis todos equivocados. ¡¡La mejor es la de mi madre!! 😎

«- Mamáááá!! pásame la receta, porfis!!

– Mejor voy a ayudarte a hacerla, que para mí es de las de ´lo que admita’, que sé que te encantan. »

¡Qué graciosa mi madre!

Pues bien, tras pesar lo que iba «admitiendo», así quedó:

Ingredientes:

4 paquetes de galletas Petit de Schar

300g chocolate fondant marca apta

300g mantequilla (puede ser margarina)

300g azúcar glas marca apta (si no somos muy golosos podemos bajar la cantidad a 250g)

3 claras de huevo (en verano mejor utilizar 100 ml de claras pasteurizadas) (opcional)

400g de leche (puede ser vegetal)

1 cucharadita de café soluble

un chorrito de brandy (opcional)

Para decorar: cacao puro en polvo marca apta y coco rallado (opcional)

Elaboración:

1. Deshacer chocolate al microondas o al baño maría. Reservar hasta enfriar.

2. Utilizar la mantequilla a temperatura ambiente (para que no esté dura y se pueda trabajar). Batirla con el azúcar glas, preferiblemente con varillas.

3. Añadir el chocolate deshecho ya frío a la mezcla anterior, y seguir batiendo hasta obtener una mezcla homogénea.

4. Batir las claras a punto de nieve e incorporar a la mezcla poco a poco, con movimientos envolventes (sin batir), hasta que esté todo bien integrado. Reservar.

5. Preparar una bandeja en la que montar la tarta. Poner una capa de galletas remojadas en la leche caliente + café + brandy (si más empapaditas están las galletas, sin que se lleguen a romper, mejor). A continuación poner una capa de la crema de chocolate. Seguidamente otra capa de galletas… y así sucesivamente, mientras queden galletas y crema. Terminar con una capa abundante de crema.

6. Decorar la superficie con cacao en polvo (espolvoreado con ayuda de un colador), con coco, con fideos de chocolate, con chuches, con almendra crocanti o con lo que más nos apetezca.

Servir fría pero no recién sacada de la nevera, para apreciar mejor la textura del chocolate.

Para mí las mejores galletas para hacer esta tarta, sin duda son éstas de Schar:

Deliciosa…

Pues esta es la tarta típica de galletas de mi familia. ¡Espero que os guste!